La arquitectura de data fabric se ha convertido en un enfoque innovador para la gestión de datos empresariales. Consiste en un “tejido” unificado que conecta de forma inteligente todas las fuentes de datos dispersas de una organización, permitiendo acceder y compartir la información en tiempo real sin importar dónde resida.
Para los bancos y entidades financieras, data fabric ofrece una vía para superar los silos de información y aprovechar al máximo sus datos de manera ágil y segura.
En este artículo presentamos los fundamentos de la arquitectura data fabric, sus componentes tecnológicos clave, y su comparación con otras arquitecturas de datos como data warehouse, data lake, data lakehouse y data mesh. Además, exploraremos escenarios de uso específicos en el sector bancario, ilustrando cómo un enfoque de data fabric puede generar valor tangible en entornos bancarios.
Fundamentos de la arquitectura data fabric
¿Qué es data fabric? En esencia, data fabric (o “tejido de datos”) es una arquitectura de datos unificada que integra de forma segura y automatizada múltiples fuentes de datos dispares, sin requerir que todos los datos se muevan a un repositorio central. Es decir, proporciona una capa conectada que permite acceso y compartición de datos sin importar dónde o cómo estén almacenados, ya sea en bases de datos locales, data warehouses, data lakes o sistemas en la nube.
Los usuarios finales pueden ver y usar datos unificados en un entorno de autoservicio, mientras los datos debajo permanecen distribuidos en distintos sistemas. Esto hace la gestión de datos más eficiente y mejora la toma de decisiones al ofrecer una vista completa y confiable de la información.
Componentes y capacidades clave de una arquitectura data fabric
- Integración y virtualización de datos: conecta diversas fuentes de datos (estructurados o no, locales o en la nube) mediante integración lógica o virtualización, evitando duplicaciones y permitiendo acceso en tiempo real. Su meta es entregar el dato correcto, en el formato y momento adecuados, simplificando el acceso a datos dispersos.
- Metadatos activos y catálogo de datos: utiliza metadatos dinámicos para automatizar y optimizar la gestión de datos. Con catálogos de datos y metadata management, identifica ubicación, calidad, uso y relaciones entre datos. Gracias a IA y grafos de conocimiento, facilita el descubrimiento y entendimiento de datos empresariales.
- Automatización e inteligencia aumentada: la IA permite automatizar tareas como integración, calidad y preparación de datos. La arquitectura data fabric genera recomendaciones y alertas, reduciendo el esfuerzo manual y haciendo frente a la demanda creciente sin depender solo de expertos técnicos.
- Gobernanza y seguridad integradas: incluye control de acceso, trazabilidad, calidad y cumplimiento normativo de forma nativa. Las políticas de seguridad y privacidad se aplican de manera coherente en toda la arquitectura, integrando la gobernanza como parte esencial del sistema.
Gracias a estos componentes, una arquitectura data fabric permite gestionar datos distribuidos a gran escala de manera más ágil y escalable. No reemplaza los sistemas existentes, sino que los conecta y potencia. De hecho, una ventaja práctica es que no requiere “arrancar y sustituir” las inversiones previas en data lakes o warehouses; más bien las aprovecha y las envuelve en una capa unificada y automatizada.
Así, organizaciones como los bancos pueden modernizar su infraestructura de datos de forma evolutiva, añadiendo una data fabric sobre sus sistemas actuales para ofrecer integración en tiempo real, mejor calidad de datos y acceso más fácil, sin perder las inversiones ni detener operaciones existentes.
Comparación de data fabric con data warehouse, data lake, data lakehouse y data mesh
El panorama de arquitecturas de datos ha evolucionado con diversas aproximaciones, cada una abordando necesidades diferentes. La siguiente tabla resume, de forma simplificada, las diferencias clave, ventajas y limitaciones de cada arquitectura:
Arquitectura | Descripción / Enfoque | Ventajas principales | Limitaciones |
Data warehouse (Almacén de datos) | Repositorio central estructurado para análisis histórico. | Alta calidad y consistencia de datos; ideal para reporting empresarial. | Poco flexible; no apto para datos no estructurados ni acceso en tiempo real. |
Data lake (Lago de datos) | Almacén de datos en bruto, sin estructura previa. | Flexible, económico, escalable; ideal para ciencia de datos. | Riesgo de desorden (“data swamp”); difícil de integrar para uso inmediato. |
Data lakehouse (Arquitectura híbrida de lago + almacén) | Fusión de data lake y warehouse. | Combina lo mejor de ambos mundos: análisis unificado y bajo costo. | Aún en evolución; mayor complejidad técnica y de gestión. |
Data mesh (Malla de datos) | Modelo descentralizado donde cada dominio gestiona sus propios datos como productos. | Escala bien organizacionalmente; promueve agilidad e innovación. | Requiere madurez cultural, buena gobernanza y alto esfuerzo técnico. |
Data fabric (Tejido de datos) | Capa unificada que conecta y gestiona todos los datos distribuidos de forma inteligente. | Integra datos sin migrarlos; acceso en tiempo real; mejora el gobierno y la seguridad. | Implementación compleja y costosa; no siempre justificada en entornos pequeños. |
Las columnas anteriores presentan generalizaciones; en la práctica, estas arquitecturas pueden complementarse. Por ejemplo, una organización bancaria podría mantener un data warehouse para informes regulatorios, un data lake para grandes volúmenes de datos crudos y, sobre ellos, implementar una data fabric que conecte todo y proporcione una capa unificada. Asimismo, conceptos como data fabric y data mesh no son excluyentes – de hecho, comparten la idea de datos distribuidos – sino que data fabric aporta la tecnología para integrar datos, mientras data mesh aporta la estructura organizativa y cultural para gestionarlos. En muchos casos, las soluciones modernas combinan elementos de varias arquitecturas para lograr los objetivos de negocio.
Escenarios de uso en banca para data fabric
Existen casos de uso relevantes en el sector bancario donde una arquitectura data fabric aporta beneficios significativos. El sector financiero maneja enormes volúmenes de datos sensibles y opera bajo estrictas regulaciones, por lo que enfrenta constantes retos de integración, calidad y control de la información.
Gobierno de datos empresarial
En banca, un gobierno de datos robusto es indispensable para asegurar la confiabilidad de la información usada en decisiones críticas (por ejemplo, cálculo de capital, reportes a reguladores) y para mantener la confianza del cliente.
Una arquitectura data fabric contribuye fuertemente al gobierno de datos al centralizar políticas y seguimiento sobre datos que residen en múltiples sistemas. Gracias a su capa unificada de metadatos y catalogación, permite saber qué datos existen y dónde, quién los usa y con qué propósito, y establecer definiciones y reglas comunes en toda la organización. Por ejemplo, a través del data fabric, un banco puede trazar el linaje de un dato financiero específico desde su origen hasta un informe regulatorio. Esto facilita auditorías internas y externas, y ayuda a identificar rápidamente cualquier inconsistencia.
Asimismo, las reglas de calidad (como formatos estándar, eliminación de duplicados, validación de rangos) se pueden implantar una vez en la capa fabric para que automáticamente se apliquen a todos los datos integrados. Todo esto conduce a datos más confiables y consistentes para la toma de decisiones. Importante destacar que el data fabric no solo documenta y monitorea, sino que actúa – por ejemplo, impidiendo accesos no autorizados o disparando alertas cuando un dato crítico está faltando –, garantizando un gobierno proactivo.
Cumplimiento normativo y seguridad de datos
Los bancos operan bajo numerosas regulaciones de datos: leyes de privacidad (como GDPR en Europa o la Ley de Protección de Datos Personales), normas financieras (BCBS 239, Sarbanes-Oxley), estándares de seguridad (PCI DSS para datos de tarjetas, por ejemplo) y requisitos contra delitos financieros (KYC/AML), entre otras.
Cumplir con estas normas exige saber dónde está cada dato sensible, quién puede acceder a él, cómo se está usando y garantizar que solo se use con fines permitidos. Aquí, la arquitectura data fabric ofrece una gran ventaja: al unificar la gestión de metadatos y accesos, permite aplicar las normas de cumplimiento de forma consistente en todos los sistemas. Por ejemplo, si un cliente ejerce su derecho de eliminar sus datos, el data fabric facilita localizar todas sus apariciones (en bases de datos, en el data lake, en logs) y asegurar su anonimización o borrado según corresponda. Del mismo modo, si se debe garantizar que datos de tarjetas de crédito estén encriptados en cada entorno, la capa unificada puede aplicar esa política transversalmente.
Un caso concreto es la consolidación de datos para reportes regulatorios. Con data fabric, se puede orquestar que la información requerida se recolecte virtualmente de cada fuente en tiempo casi real, con controles de calidad incorporados, reduciendo errores manuales y retrasos. Adicionalmente, los accesos a datos sensibles pueden centralizarse.
Un data fabric bien implementado sirve como guardián, asegurando cumplimiento normativo “de fábrica” en cada flujo de datos. De hecho, ya se observan bancos que usan data fabric para garantizar que los datos de clientes en todas sus sucursales y aplicaciones cumplen con GDPR y PCI DSS, permitiendo incluso que aplicaciones de IA analicen esos datos sin riesgo de violar privacidad. En resumen, en un entorno donde las multas por incumplimiento son cuantiosas, data fabric ofrece la tranquilidad de un control centralizado y en tiempo real sobre las obligaciones regulatorias y de seguridad.
Integración de silos de datos y sistemas heredados
Las instituciones financieras típicamente operan una multitud de sistemas, muchas veces adquiridos en diferentes épocas o tras fusiones. Esto deriva en silos de datos donde información valiosa queda aislada en cada plataforma.
Un gran beneficio de data fabric es su capacidad de trenzar esos silos en una malla conectada, sin tener que reemplazar cada sistema antiguo. Por ejemplo, un banco puede tener datos de clientes repartidos entre la base de datos de cuentas corrientes, el CRM de ventas, el sistema de tarjeta de crédito y una aplicación móvil – todos con tecnologías distintas. Con data fabric, se configura una capa común que se conecta a cada fuente en su propio lenguaje, expone sus datos de forma estándar y permite combinarlos bajo demanda. Así, se podría obtener una vista única del cliente o del negocio sin migrar los datos físicamente de sus sistemas originales.
En la práctica, esto acelera proyectos que antes eran titánicos. Además, esta integración en tiempo real habilita operaciones antes impracticables, como por ejemplo detectar un evento en un sistema (un cliente hace una transacción grande en su cuenta) y reaccionar con datos de otro (combinar con su historial de inversiones para alertar a su asesor). En resumen, para la banca que arrastra una herencia tecnológica heterogénea, la arquitectura data fabric actúa como un “traductor universal” que integra los silos de información, reduciendo drásticamente la fricción para compartir datos a lo largo y ancho de la organización.
Personalización del cliente y visión 360°
En la era digital, los clientes bancarios esperan experiencias personalizadas y coherentes a través de todos los canales (sucursal, web, app móvil, etc.). Para lograr una hiper-personalización, las entidades necesitan una visión 360° del cliente, es decir, consolidar en tiempo real todos los datos relevantes de cada persona. Data fabric unifica esa visión del cliente en tiempo real, conectando sistemas internos y fuentes externas relevantes y proveyendo los datos integrados bajo demanda para fines analíticos o operativos.
Con una arquitectura tradicional, los datos del cliente quedan aislados en distintos canales. En cambio, con data fabric, es posible integrar en tiempo real toda la información relevante —como interacciones en redes, movimientos bancarios o consultas en el call center— y generar un perfil unificado. Esto permite que un asesor o sistema digital ofrezca recomendaciones personalizadas en el momento oportuno. Tres de cada cuatro entidades financieras ya estén considerando esta arquitectura para potenciar su inteligencia de cliente.
El resultado es una mejora sustancial en la experiencia del cliente: con todos los datos al alcance, se evitan respuestas incompletas o contradictorias, y se puede anticipar mejor las necesidades. Data fabric potencia la personalización al derribar las barreras entre datos de cliente, proporcionando las bases para servicios bancarios más relevantes, oportunos y contextuales para cada persona.
Detección de fraude y análisis en tiempo real
La prevención del fraude es una prioridad absoluta en banca, y depende cada vez más de analizar grandes volúmenes de datos en tiempo real para detectar patrones sospechosos. Sin embargo, los datos relevantes para identificar fraude a menudo residen en múltiples sistemas: sistemas de tarjetas de crédito, base de datos de transacciones bancarias, registros de canales electrónicos, información de ubicación, etc. La arquitectura data fabric brinda una solución eficaz para aglutinar y analizar estos datos de forma instantánea, mejorando significativamente las capacidades antifraude.
Implementando data fabric, el banco puede transmitir las transacciones en streaming desde todos sus sistemas a través de la capa unificada, integrándolas en tiempo real con herramientas analíticas o modelos de machine learning. Esto permitiría, por ejemplo, que un algoritmo vea el panorama completo de la actividad de un cliente a través de todos los canales a medida que ocurre, detectando enseguida si hay un patrón anómalo (como un intento de retiro en un país diferente seguido de una compra en línea inusual).
Otra ventaja es la trazabilidad y retroalimentación: con data fabric, una vez marcada una transacción como fraudulenta, esa información se propaga por el tejido para evitar, por ejemplo, que el mismo usuario intente otro ataque en otro producto. La gobernanza integrada garantiza que, incluso al compartir datos entre sistemas para detección de fraude, se respeten las reglas de privacidad (solo se comparten atributos necesarios). En resumen, en el ámbito de prevención del fraude, la capacidad de integrar fuentes de datos heterogéneas en milisegundos que ofrece data fabric se traduce en respuestas más rápidas y completas, fortaleciendo la seguridad tanto para el banco como para sus clientes.
Cuándo optar por data fabric en entornos bancarios
En hiberus creemos firmemente que la arquitectura data fabric es un pilar estratégico para modernizar la gestión de datos en la banca. Su capacidad para integrar de forma ágil y segura datos dispersos en múltiples plataformas —cores bancarios, data lakes, warehouses y nubes híbridas— permite a las entidades acelerar iniciativas clave como la analítica avanzada, la inteligencia artificial, el cumplimiento normativo o la personalización de servicios. Nuestra propuesta se basa en un enfoque evolutivo que aprovecha las inversiones existentes, incorpora automatización e inteligencia aumentada, y garantiza una gobernanza sólida, reduciendo tiempos y riesgos frente a enfoques disruptivos.
Aunque en entornos pequeños pueden existir alternativas más sencillas, para bancos medianos y grandes, especialmente aquellos con retos de integración y silos de información, data fabric se convierte en un auténtico sistema nervioso digital: mejora la calidad del dato, habilita decisiones en tiempo real, incrementa la eficiencia operativa y permite una respuesta rápida ante demandas regulatorias o de negocio. Desde nuestra área de Data e IA, ayudamos a implantar esta arquitectura con rapidez, visión estratégica y foco en resultados tangibles. ¡Contáctanos con tu reto!
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